Las bodegas de Valderas son distintas a las acostumbradas en Tierra de Campos. La razón es que éstas se encuentran emplazadas bajo las casas del pueblo, construidas en sillares de piedra o de ladrillo. El resto de bodegas de la comarca de Campos se construían a las afueras de los pueblos como pequeñas edificaciones, con su espacio subterráneo e independiente de dichos pueblos.
En Valderas, estas obras de ingeniería y construcción como son las bodegas se solían realizar previamente a la construcción de las casas, cuyo objetivo era la fabricación del vino para un consumo privado y familiar. Si en la casa se vendía vino se anunciaba por la colocación a la puerta de una banderita o trapito colorado.
Fue durante los siglos XVI, XVII y XVIII cuando se construyeron las mejores bodegas. Había una calle junto a la de Escuderos y al lado de San Claudio el Viejo que se llama la calle de Los Lagares. El material de construcción es la piedra como ya hemos indicado antes, pero no es una piedra originaria del lugar, sino que se traía de lugares tan alejados como Soria o Burgos.
Hoy en día, estas bodegas son de propiedad privada y no se visitan con facilidad. Pero el visitante puede observar en su camino por las calles de la villa pequeños respiraderos en la parte inferior de las fachadas, que indican la existencia de una bodega, aunque muchos de ellos ya están cegados.